Este estado nos permite experimentar la vida desde una perspectiva de unidad y conexión, en lugar de separación y juicio. La espiritualidad, en este contexto, se convierte en un camino hacia la liberación del sufrimiento causado por el Juez Interior.
Las voces de la mente pueden ser muy poderosas y pueden influir en nuestro comportamiento. Si nuestras voces internas son positivas y motivadoras, podemos tener más confianza en nosotros mismos y en nuestras habilidades.
Por el contrario, si nos decimos a nosotros mismos "voy a dar lo mejor de mí en la entrevista y tengo habilidades valiosas para ofrecer", estamos generando pensamientos positivos que aumentarán nuestra autoestima y nuestras posibilidades de éxito.
La conciencia es el primer paso para reconocer y dejar ir a tu crítica/o interna/o. Muchas/os de nosotras/os ni siquiera nos damos cuenta de su presencia porque son mensajes que ya tenemos muy interiorizados. Detente la próxima vez que sientas ansiedad. Identifica la voz crítica interna. Intenta identificar la situación que puede haberla desencadenado: ¿Cuáles son tus sentimientos auténticos sobre esta situación?
Tal vez lo que necesitas realmente es decirle algo a alguien, indaga en tus sentimientos, trata de excavar hasta conseguir qué emociones tienes bloqueadas y entonces replantea las frases.
Igualmente, podemos ir aprendiendo a sentirnos plenos con las cosas que conseguimos, aprendiendo a gozar de nuestra manera de hacer las cosas. Es decir ofreciéndonos la valoración y el reconocimiento auténtico que todos necesitamos.
No nos permite disfrutar de nuestros éxitos porque “nunca es suficiente”o «es lo que tengo que hacer».
Para aquellos que prefieren una aproximación autodidacta, también hay disponibles una variedad de libros y aplicaciones que ofrecen ejercicios y recursos basados en los principios de la TCC.
Una de mis formadoras y maestras, llama a este crítico interno «el susurrador». A mí me gusta mucho este calificativo, porque evoca a una especie de consciencia permanente que nos susurra al oido demasiadas cosas. «Ten cuidado de no equivocarte», get more info «muéstrate sonriente en este grupo de amigos no vayan a darse cuenta de tu inseguridad», «no estás estudiando lo suficiente», «te falta mucho por conseguir», «recuerda que aun no has hecho esto», «esto lo estás haciendo mal»… Es decir que el crítico interno está pendiente de si hacemos o no lo correcto, en qué medida y de qué manera lo estamos consiguiendo, generalmente desde una perspectiva negativa o amenazante.
Al navegar en este sitio Internet o pulsando "Aceptar", aceptas el uso de cookies y otras tecnologías para procesar tus datos personales con el fin de mejorar, personalizar y proteger su experiencia en este sitio Net. Además, los terceros (Google) con los que nos asociamos pueden almacenar cookies en tu dispositivo y usar tecnologías similares con el fin de recoger y usar cierta información para la personalización de la publicidad y mediciones de datos de audiencia y datos analíticos. Más información sobre esto y sobre cómo gestionar tu configuración de privacidad. ACEPTAR
El primer paso que deberá tomar para detener sus comportamientos de autosabotaje es identificarlos.
Si no desea que rastreemos su visita a nuestro sitio, puede deshabilitar el rastreo en su navegador aquí:
Estas prácticas nos permiten observar nuestros pensamientos sin identificarnos con ellos, lo que cut down el poder del juez interno y nos ayuda a vivir en el presente.
Comparación con los demás: La tendencia a compararnos con otros, exacerbada por las redes sociales y los ideales inalcanzables promovidos por los medios, puede conducir a sentimientos de insuficiencia y descontento con nuestras propias vidas.